Los clientes de la red de explotación sexual infantil que operaba a cuatro cuadras de distancia del Palacio de La Moneda son residentes del "sector oriente" de la capital en "perfecto conocimiento" de que las víctimas eran menores de edad, afirmó este jueves el subsecretario del Interior, Luis Cordero.
Por este caso, cuatro venezolanos -miembros de una célula del Tren de Aragua coordinada desde el país caribeño- fueron detenidos el martes pasado y quedaron en prisión preventiva.
El Ministerio Público pudo acreditar los delitos de asociación criminal, trata de personas con fines de explotación sexual, trata de personas y tráfico ilícito de migrantes.
Además, el delito de homicidio calificado con alevosía, ensañamiento y premeditación, por la muerte de un sujeto integrante de la misma banda que fue encontrado en una maleta en Colina, cuya investigación destapó la red de explotación sexual que lideraban.
En un principio se hablaba de dos mujeres explotadas; sin embargo, durante la audiencia de formalización se conoció que se trataba de al menos 30 mujeres y entre ellas había menores de edad con documentación falsa.
Al respecto, la Fiscalía confirmó que está trabajando junto a la Policía de Investigaciones (PDI) para determinar quiénes fueron los hombres que contrataron los servicios sexuales.
"Los clientes de explotación sexual infantil en estos casos eran clientes domiciliados en Vitacura, en el sector oriente de Santiago, y, por lo tanto, respecto de ellos también se va a ejercer la persecución penal", dijo el subsecretario del Interior en una rueda de prensa.
Cordero enfatizó que "este es un tipo de delito que no solo implica el punto de vista de la comisión del delito de la vulneración de derechos, sino que también respecto de quien participa de esos delitos, requiriendo estos servicios".
"Tal como informó la policía cuando dio cuenta de la detención de estas personas, quienes requerían y quienes actuaban como clientes tenían perfecto conocimiento de que eran menores de edad", indicó.