"Contra el cartel de las AFP": Frente Amplio hizo "volanteo masivo" por la reforma previsional
El principal partido de Gobierno pretende hacerle frente a la campaña publicitaria que tienen las aseguradoras privadas en la discusión del 6%.
El principal partido de Gobierno pretende hacerle frente a la campaña publicitaria que tienen las aseguradoras privadas en la discusión del 6%.
El Frente Amplio realizó esta tarde un "volanteo masivo" en 31 puntos del país, con el fin de informar sobre la reforma previsional, cuya discusión quedó trabada en la Comisión de Trabajo del Senado este miércoles.
El partido oficialista pretende hacer frente a la desinformación que denuncian por parte de la Asociación de AFP, a raíz de la campaña de publicitaria en medios de comunicación masiva con frases que, según el FA, no se ajustarían al debate.
Desde el centro de Santiago, el diputado Gonzalo Winter (FA) señaló que "se ha congregado un montón de gente, estamos impresionados por la recepción" y agregó que "la gente está verdaderamente indignada con estos 16 años de ver a la política discutir sobre las pensiones, por este debate intoxicado por el cártel de las AFP".
"Es increíble, creo que este debate hay que ponerlo en estos términos: Las AFP engañaron a la ciudadanía con una cotización de solo el 10% para que salga de las cajas, prometieron un 70% de la tasa de remplazo, después en el 2000 prometieron el 100%. Y ahora nos dicen que ellos son los expertos, que saben sacar los cálculos", emplazó.
En esa línea, hizo un llamado a la ciudadanía a que "entienda que la Asociación de AFP o el cártel de la AFP, más correctamente dicho, son unos mentirosos y son personas que no saben contar".
No obstante, la acción del principal partido de Gobierno generó controversias en el mundo político, que podría influir en las próximas de discusiones que se lleven en enero, cuando se retome el debate en el Congreso.
El ministro de Hacienda, Mario Marcel, fue consultado por la acción del Frente Amplio y señaló que "no recuerdo que haya habido esta pregunta cuando estaba la campaña 'Con mi plata no'", aludiendo a por qué les llama la atención a algunos que un sector quiera salir a informar a las personas.
De todas formas, dejó de lado la polémica y abordó el estado de la tramitación. "Ya de vuelta del receso de fin de año, se empezaría a funcionar con varias sesiones a la semana, en lugar de una como lo hemos hecho hasta ahora. Esto va a seguir durante todo el mes de enero", sostuvo.
En ese sentido, destacó que "es una señal de que estamos en la recta final, igual que cuando uno está en una carrera y ve que está cerca de la meta, acelera el paso".
Una de las definiciones pendientes en la discusión de la reforma es la separación de la industria establecida en el proyecto, que significaría el fin de las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) como las conocemos ahora, como explicó la ministra del Trabajo, Jeanette Jara (PC).
"Como las AFP son un sistema obligatorio de ahorro, tienen que ser más eficientes, para lo cual vamos a proponer la división de la industria en dos funciones, inversores y cuentas. Con eso las AFPs desaparecen como las conocemos hasta el día de hoy", señaló la secretaria de Estado.
La propuesta establece también que "haya una mayor competencia a través de la licitación, pagando comisiones que, además, digan relación con el resultado de los fondos".
"Es decir, si el fondo baja, la comisión será menos; si el fondo sube, la comisión será más, y no lo que pasa hoy día, que la gente se queja porque siente que pagas todos los meses lo mismo, independiente de cómo le vaya su fondo", añadió.
En entrevista con Lo Que Queda del Día, la economista Paula Benavides, integrante de la Comisión Técnica para la Reforma Previsional, comentó que en la instancia "no nos pronunciamos respecto de una distribución específica del 6% -si es que era 5-1, 3-2 o lo que sea que fuera-, sino que trabajamos en diferentes escenarios para facilitar después una deliberación política, pero también tratamos de trabajar en estos escenarios para poder mostrar los beneficios que se construían con estos escenarios".
En ese sentido, la ex presidenta ejecutiva del centro de estudios Espacio Público consideró "importante que esta discusión pueda darse en función de los beneficios y de las mejoras de pensiones para las actuales y futuras generaciones que se pueden obtener con distintos diseños del 6%".
"Hay un acuerdo de que se aumente esa tasa de cotización en 6%. Hay un acuerdo también en que exista un complemento transitorio a las pensiones actuales y durante una transición con un umbral mínimo de años cotizados. Eso es lo que se ha conocido en este beneficio como una garantía, la garantía 0,1 UF por año cotizado. También hubo acuerdo en que se introdujera un componente más permanente para reducir las brechas de género que se originan en las pensiones por la mayor expectativa de vida de las mujeres", resaltó la magíster en Economía Aplicada de la Universidad Católica.
Añadió que, "si miramos más el diseño de lo que podemos hacer con esta cotización del 6%, cuidando que sea sostenible, que hayan mejoras y que se complementen ciertos grupos actuales para que también haya un aumento sustantivo en el futuro, creo que es algo más fácil también de poder presentar a la ciudadanía".
Con todo, Benavides subrayó que "avanzar en la reforma de pensiones es una urgencia que es bien evidente y que el costo de no hacerlo también es un costo muy grande que tiene que tenerse presente".
"Respecto de qué reforma aprobar, mi impresión es que el trabajo técnico que ha ido acompañando este proceso entrega muchos elementos para poder tomar buenas decisiones y explicar también a la ciudadanía los beneficios que pueden entregarse. En el informe se puede encontrar también una tabla que tiene ejemplos de casos específicos de cuánto aumentarían las pensiones para una mujer que cotizó 10, 15 o 20 años y para un hombre en las mismas situaciones, y pueden alcanzarse aumentos en las pensiones del orden de 25 o 30%, que no es poco", relevó.
A renglón seguido, advirtió que "hacerse cargo de un mal funcionamiento del sistema en términos de una competencia insuficiente también es algo significativo, porque, en definitiva, eso va a representar un menor costo para las personas que es descontado de su salario líquido".
De esta forma, Benavides aseveró que "pueden lograrse cambios que han tenido un sustento técnico en el análisis; lo que falta ahora es que los liderazgos políticos puedan acordar. Todos tienen que ceder para que eso ocurra y conformar, creo yo, un escenario donde uno acote los cambios, con tiempos cortos hay que ser muy precisos; evitar la creatividad de última hora, cambiar mucho diseño, incorporar cosas nuevas, para que esto pueda salir responsablemente, con mucha transparencia, de cara a las personas".