La policía investiga si se trata de un ajuste de cuentas entre facciones criminales rivales.
El episodio refleja la grave crisis de violencia en la que está sumido el estado desde los Juegos Olímpicos de 2016.
Los cuerpos sin vida de ocho hombres y una mujer fueron hallados ayer miércoles por la Policía.
Los cuerpos sin vida de ocho hombres y una mujer fueron hallados ayer miércoles por la Policía en diferentes puntos del municipio de Nova Iguaçu, en la región metropolitana de Río de Janeiro.
Las autoridades brasileñas encontraron a las víctimas junto a dos carreteras de la localidad, que hace parte de la Baixada Fluminense, una zona deprimida y peligrosa integrada por varios barrios vecinos a la ciudad de Río.
El Departamento de Homicidios investiga si se trata de un ajuste de cuentas entre facciones criminales rivales, pues ocho de los fallecidos son oriundos del Morro Sao Simao, una favela donde varias bandas se disputan el control del tráfico de drogas.
El episodio refleja la grave crisis de violencia en la que está sumido el estado de Río de Janeiro desde la celebración de los Juegos Olímpicos de 2016.
El Gobierno del anterior presidente Michel Temer decretó el año pasado la intervención del Ejército en el área de seguridad del estado de Río, pero la presencia de los militares no resolvió los problemas estructurales de violencia en la región.
Por su parte, el gobernador de Río, el ex juez Wilson Witzel, quien asumió el cargo el pasado 1 de enero, ha prometido mano dura contra la criminalidad y abatir con francotiradores de elite a los "bandidos" que porten fusiles de asalto, así sea en favelas o en centros comerciales.
