La Fiscalía Nacional Económica (FNE) autorizó este lunes la venta de la filial de la brasileña Petrobras en Chile a la petrolera saudí Aramco, que permite a ésta introducirse en el mercado sudamericano.
En un informe emitido cinco meses después de que la compraventa quedara supeditada a su decisión, la FNE argumentó, entre otras razones, que las partes involucradas "carecerían de habilidad para producir cierres de mercado, ya sea mediante un bloqueo de insumos o clientes", razón que facilita la venta del 100 por ciento de las acciones de la chilena Esmax Distribución Spa, empresa de capital privado.
Asimismo, aseguró que esta transacción, "consistente en la adquisición de control en Esmax Distribución SpA por parte Aramco Overseas Company B.V., no resulta apta para reducir sustancialmente la competencia en los mercados".
Esmax, filial local de Petrobras, es una de las empresas líderes en distribución de combustibles y lubricantes en nuestro país, con decenas de estaciones de servicio, operaciones aeroportuarias, terminales de distribución de combustible y una planta de mezcla de lubricantes.
Cuando en septiembre se anunció el acuerdo sujeto a la decisión de la FNE, Aramco explicó que la adquisición de Esmax era su primera inversión minorista "downstream" (procesamiento, refinación, distribución y comercialización de los productos derivados del petróleo) en Suramérica.
Asimismo, afirmó que entre sus objetivos estaba crear una plataforma para lanzar la marca Aramco tanto en Chile como en Latinoamérica, "desbloqueando un potencial significativo para capitalizar nuevos mercados" para sus productos.